Mémoires
de la Société Archéologique
du Midi de la France

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     Tome LXV (2005)

SUMARIO

 

Jean-Luc BOUDARTCHOUK, Henri MOLET, Catherine VIERS, El Capitolium de Tolosa, la iglesia San Pedro y San Geraud y el martirio del obispo Saturnino : nuevos datos 

Un diagnóstico arqueológico realizado en los años 2004-2005, en el número 6-8 de la Plaza Esquirol, ha permitido precisar las dimensiones exactas del templo (probablemente un Capitolium) del foro de Tolosa, así como la estructura del basamento de la cella. Algunos vestigios de la iglesia San Pedro y San Geraud, edificada sobre las ruinas del templo, también han aparecido. Paralelamente, examinando las fuentes de los documetales y literarias se ha podido conocer mejor la historia del priorato de San Pedro y San Geraud desde su fundación en el siglo VI hasta su donación al abad de Aurillac. Inicialmente la iglesia estaba consagrada a San Pedro y dependía sín duda de la familia vizcondal de Tolosa. En cuanto al martirio del obispo San Saturnino en 250 (que aqui tuvo lugar se pretende) si bien testimonios antiguos de un culto rendido a éste obispo se podrían poner en evidencia al pie de este templo, por lo contrario la Vita de Saturnino parece ser un texto compuesto tardío, y el relato de su comparecencia en el Capitolio debe ser, sin duda, disociado del episodio inverosímil del toro arrastrando el cuerpo del obispo.

 

Patrice CABAU, Anne-Laure NAPOLÉONE, De la “Torre de los Maurand” en el Colegio de Perigord

Las obras efectuadas recientemente en el antiguo colegio de Perigord, han permitido interesantes observaciones arqueológicas, al mismo tiempo que abrir nuevamente el dossier de este edificio. La historia de la institución destinada a estudiantes pobres y fundada por el célebre cardinal Talleyrand de Périgord, empieza en 1362.
           Abunda documentación de archivos, que muestra las adquisiciones sucesivas de varios edificios situados en la misma manzana, y entre ellos una casa románica : la “Torre Maurand”. Las cuentas de las obras del siglo XIV dan muchos detalles sobre la Torre y otros cinco moradas (hôtels), en parte destruídas, así como sobre las nuevas construcciones. Documentos gráficos del siglo XVIII completan esta primer imagen del colegio antes de su destrucción casi total, en el siglo XIX.

 

Jean-Marc STOUFFS, La conservación-restauración de las pinturas de la iglesia Nuestra Señora del Taur (Tolosa)

La iglesia Nuestra Señora del Taur conserva pinturas murales góticas descubiertas en 1872, cuando se hicieron obras de renovación del edificio. Copiadas y restauradas en aquel momento, se disimularan debajo un emmaderado, para salir nuevamene a luz a finales de los años 1950.
           Los trabajos de restauración-conservación emprendidos en el año 2001 para acabarse en noviembre de 2004 et que aquí relatamos detalladamente, nos informan, por estudios llevados a cabo entonces, cuales son los materiales que constituyen la obra y la técnica de ejecución. Además, la eliminación de intervenciones anteriores y una nueva restauración pictural han permitido encontrar una cosa perdida : la comodidad de lectura de un conjunto bastante bien conservado.

 

Michelle FOURNIÉ, El oratorio de San Remigio y los hospitalarios de San Juan de Jerusalén

El proceso que se abre en 1496 revela la existencia de un oratorio dedicado a San Remigio, en el barrio de la Dalbade. El complejo de devoción en el que se integra este santuario incluye un muro decorado por un conjunto monumental de pinturas y estatuas, una capilla con claraboya incluida en este mismo muro, con un altar, mobiliario litúrgico y una “mesa” soportando un plató de limosna, establecida en la misma calle.
           El muro continúa a lo largo de la calle Saint-Rémézy, cercando el convento de los Hospitalarios de San Juan de Jerusalén, y creando conflictos. Este oratorio, aunque pequeño, parcialmente construido con material ligero, resiste hasta el siglo XIX, manteniendo así el culto de San Remigio, un santo acercado a la monarquía. Según la tradición tolosana San Remigio, en cierto modo, hubiese apadrinado San Germier, uno de los obispos sucesores de San Saturnino transmitiendole sus insignias episcopales.

 

François BORDES, Ritos y prácticas ceremoniales en Tolosa, en la baja Edad Media y el Renacimiento

 El análisis de los grandes séquitos urbanos y el estudio de los ritos desarrollados en este marco permiten un mejor acercamiento al sentido que encubren para la communidad, y sobre todo para sus primeros representantes, los “Capitouls” (Concejales). Las procesiones generales, y en particular las del Corpus Domini, los situan al primer plano del evento : llevan ellos el palio abrigando al santísimo sacramento. Las entradas de los reyes, de los príncipes y de los notables nacionales o regionales dejan entrever una jerarquía de la representación, según la importancia del huésped ; pero aparecen sobre todo como momentos fuertes de afirmación de una identidad comunal. Por fín los honores funerales rendidos a los monarcos difuntos, son ocasiones de pelas entre instancias municipales e instancias reales. Aquí es el reto del poder en la ciudad, en estos grandes espectáculos urbanos.

 

Géraldine CAZALS, Una contribución inédita a la histografía tolosana : el Catalogue et summaire de la fundation [...] de Tholoze de Guillaume de la Perrière (1539-1540)

En 1539, el humanista Guillaume de la Perrière emprendió, a petición de los Capitouls (Concejales), la composición de un Catalogue et summaire de la fundation, principalles coustumes, libertez, droictz, privilieges et aultres actes des cité, conté, capitoulz, citoyens et habitans de Tholoze para introducir el conforme del Liber magnus albus anticus nacido de la desmembración de la colección inaugurada en 1295 por Bernard de Sainte-Eulalie. Esta obra conservada por dos manuscritos de los Archivos municipales de Tolosa contituyen un estado interesante y desconocido de la historiografía tolosana de los Gestes de Nicolas Bertrand y la Histoire tolosaine de Antoine Noguier. En efecto la erudición de La Perrière, su cultura clásica, sus conocimientes teológicos así como sus lecturas humanistas otorgan singular profundidad a las antiguas leyendas relativas a la historia tolosana. Mientras la soberanía real acentúa su dominio frente al municipio tolosano, habilmente él sostiene las pretensiones jurídicas de los magistrados de la ciudad.

 

Jeanne BAYLE, Los pintores sobre vidrio tolosanos en el siglo XVI 

A principios del siglo XVI, los pintores sobre vidrio disfrutan de los mismos estatutos que los pintores y los vidrieros, de quienes se separan poco a poco. Son a penas unos treinta a lo largo del siglo, pero sólo seis o siete tienen relativa importancia. El taller más próspero es el de Antoine Ferret, que trabajo entre los años 1512-1554, y a quien se puede atribuir la capilla Santa Juana de Arco, en la catedral de Tolosa. En el último cuarto del siglo, los hermanos Jean y Arnaud Mons son los únicos verdaderos pintores sobre vidrio. El arte del vidrio se pierde en Tolosa, pues no conoció el desarrollo de una escuela local como las hubo en Normandie y en Champaña.

 

Georges COSTA, El monumento de Henri de Sponde, obispo de Pamiers, en la catedral de Tolosa 

El monumento de Henri de Sponde es considerado, con justeza, como obra característica de la arquitectura funeraria del siglo XVII. Se erigió a la memoria de este erudito prelado, quien se consagró al estudio de la historia de la iglesia, trabajo que emprendió en Roma antes de su nombramiento en 1626, como obispo de Pamiers. Murió Henri de Sponde el 18 de mayo de 1643 y fue inhumado en la catedral de Tolosa, donde estaba retirado.
           Se encargó su monumento funerario en 1643, a Didier Sansonnet, maestro picapedrero de reputación, cuya actividad se desarrolla durante la primera mitad del siglo XVII en Tolosa y su región. Demostró así un aspecto poco conocido de su talento. Se presenta como un frontispicio de piedra enriquecido con mármol, y en donde el busto del difunto, inscrito en un óvalo, domina el epitafio que ocupa el centro de la composición. Este modelo de “monumento sobrepuesto” conoció un gran favor en Italia, durante el Renacimiento ; así fue también en Francia, pudiendo seguirse su evolución a través de dibujos.

 

Jean-Michel LASSURE, El adorno de vajilla de Giroussens (Tarn) en el siglo XVII

El análisis del adorno pintado sobre una centena de fuentes y platas del siglo XVII en los talleres de Giroussens y pertinecientes hoy a colleciones del Museo del País Rabastinense, ha permitido establecer un catálogo de los motivos utilizados, así como precisar las pautas según las cuales se han combinado. En estas piezas, cuyo adorno se organiza en dos registros, los motivos del ala casi siempre son de inspiración floral dispuestos de manera radial o giratoria o mixta. Por lo que se refiere a la decoración de la bacía, las flores, aisladas o metidas en un jarro, eran preferidas por los alfareros ; también encontramos animales pertenecientes al cotidiano : caballos, perros, cabras y pájaros. Aunque pintorescos, los motivos antropomorfos no son frecuentes. Motivo insólito es la representación, aunque relativamente fiel, de la capilla de Santa Rafina en la iglesia parroquial.

 

Guy AHLSELL DE TOULZA, Los tapices bruselenses de la historia de Zenobia, reina de Palmira, en el castillo de San Gery (Tarn) 

El castillo de San Gery, cerca de Rabastens, poseía una serie de quince tapices de Bruselas del siglo XVII, que contaban la historia de Zenobia, y que fueron vendidos en el año 1928. Esta colgadura se componía de ocho piezas con la historia de Aureliano et Zenobia, reina de Palmira, completadas por otras siete piezas con la historia de Cleopatra y Marco-Antonio y la historia de Didon y Eneas, o sea un conjunto impresionante de 56,70 m de largo. Fue tijido por los años 1665-1670, con lana y seda, en el taller de Gerardo Peemans, uno de los más importantes, por aquel entonces, de Bruselas. Los cartones eran de Justo d’Egmont, antiguo colaborador de P.P. Rubens y de Simon Vouet en París, antes de su instalación en Amberes. Enriquecida por suntuosos ribetes, esta colgadura es obra maestra del arte barroco flamenco.

 

Pascal JULIEN, Para que los mármoles floten mejor : mapas del “Cours de Garonne” de los años 1716-1720 realizados por Hippolyte Matis, geógrafo del rey 

Director de los “Bâtiments du roi” a partir de 1708, el duque de Antin supervisaba el abastecimiento en mármoles de las obras colocadas bajo su responsabilidad. Por interés personal – familiar, ecónomico y cortesano – pero también y sobre todo por la belleza de esos mármoles, puso su atención en optimizar la explotación y el transporte de los mármoles franceses, en particular los pirenaicos ; pidió al geógrafo del rey Luis XIV, Hippolyte Matis, la relación detallada de la corriente del río Garona y de sus riberas, desde el manantial hasta Burdeos. Buscaba de esta manera el poder controlar y mejorar la navegación de las balsas cargadas de bloques, entre los Pirineos et la Gironda. Estos mapas, conservados, constituyen un documento geográfico, histórico y estético excepcional.

 

Louis PEYRUSSE y Bruno TOLLON, “Dame Tholose” y la columna Dupuy 

Abrir de nuevo el dossier de “Dame Tholose” se imponía, debido a los trabajos recientes sobre el humanismo en Tolosa. Su realización en 1544 se justifica plenamente en el contexto tolosano de aquellos años en que se solicitan sabios modelos a la Antiguedad (puertas triunfales encargadas por la ciudad, figuras envainadas en casas ricas, sin olvidar la escenografía de los retratos capitulares). Al lado de Nicolás Bachelier, Juan Rancy tiene un gran papel en la ruptura con las formas hasta entonces apreciadas.
           El monumento Dupuy, donde figura “Dame Tholose”, es en 1832 una obra maestra, hecha de reutilizaciones y de montajes. Llama la atención por la alianza de la modernidad técnica de los materiales y de la tradición, así como por la cualidad singular de la escultura de Griffoul Dorval.

 

Bernard MONTAGNES O.P., Las construcciones de los Dominicos en Tolosa en el siglo XIX entre la calle Velane y la calle Espinasse 

El Padre Lacordaire estableció a los Dominicos en Tolosa, en el año 1853, en un hotel privado 14, calle Velane. La única construcción nueva en 1854-1855 fue una capilla neo-gótica, obra del arquitecto Auguste Delort. Después de 1870 la adquisición del hotel Mansencal, calle Espinasse, permitió construir, en el jardín, una gran iglesia neo-gótica y un principio de convento regular, todo bajo la dirección del arquitecto Henri Bach. La iglesia empezada en 1880, con retraso debido a las expulsiones, fue consagrada en 1895. Desde 1971 no existe ya nada de aquellas construcciones entre la calle Velane y la calle Espinasse. Únicamente planos y fotografías antiguas permiten evocarlas.

 

Boletín del año académico 2004-2005 

Las actas de las sesiones de la Sociedad dan cuenta de sus diferentes actividades, particularmente las discusiones que surgen seguidamente a las ponencias, sean estas o no publicadas en los Mémoires. También se puede encontrar informaciones sobre excavaciones arqueológicas, restauraciones pendientes o descubrimientos diversos en Tolosa o en la región, así como variadas reseñas y notas : La casulla “del Padre Lacordaire” ; Tradiciones y novedades en las moradas renacentistas de Tolosa ; Dos vigas pintadas en el castillo de Flammarens ; Pintores y doradores en el Rosellón (1650-1730) ; La capilla de Nuestra Señora en la iglesia San Exuperio de Coupiac (Aveyron) ; El hospital San Jose de La Grave ; Nota sobre la arquitectura de la iglesia abacial de Conques ; Placa-hebilla merovingia de Montbrun de Corbières (Aude) ; Obras realizadas en 1736 en un molino de Labastide-Savès...

 

Traducido por Violette Fernandez

 


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